Bordalba – Asociación Cultural "La Muriega"

El “grandísimo” Ecce Homo de Bordalba

La restauración del Ecce Homo de la localidad de Bordalba

Artículo de la Escuela Taller de Restauración DPZ XIV. Publicado el 26 de Noviembre de 2015

foto1

En el momento que Ana nos presentó este lienzo quedamos impresionados principalmente por  su formato, ya que ninguno de nosotros se había enfrentado nunca a un lienzo de semejante tamaño; tres metros setenta por cuatro metros sesenta aproximadamente.

Para entonces la pieza ya había recibido por parte de la promoción anterior los primeros tratamientos que resultaron ser muy ingratos. Iniciaron el proceso de restauración con la limpieza superficial, la aplicación de biocidas, el empapelado de la policromía y la adhesión de unas bandas de tensión en todo el perímetro para sujetarlo a un bastidor temporal.

Ana nos contó que el lienzo fue encontrado en el coro de la iglesia del pueblo y posteriormente lo trasladaron al taller.

¿Y cómo es posible que un cuadro de este tamaño entre en un pequeño coro?

Pues parece que en aquel momento decidieron doblarlo como si de una “crêpe” se tratase, reduciendo su tamaño a cerca de un metro cuadrado. Con esta disposición se mantuvo conservado durante años, sufriendo el ataque de los factores externos, la deformación del soporte y pérdida de policromía en las zonas de pliegue. En la imagen que encabeza la entrada se aprecia el aspecto que tenia una vez desplegado después de tanto tiempo guardado en este estado de almacenaje.

Hechas las presentaciones de rigor,  retomamos su intervención con la limpieza del reverso, no sin antes reflexionar sobre lo que era necesario para la obra, haciendo una previsión de los pasos necesarios acometer. Este modo de proceder se ha convertido en nuestro “sanctasanctórum” casi a diario: todo el equipo reunido frente a la obra, reflexionar y valorar los beneficios que “tal o cual proceso” va a procurar a la obra. Evitamos actuar automáticamente, lo cual supone a la larga un crecimiento profesional que difícilmente obtendremos en el ámbito privado.

Con el objetivo de acometer la limpieza del reverso fue imprescindible darle la vuelta para poder trabajar en él, lo que no resultó una tarea sencilla dadas sus dimensiones.

Proceso de volteado del lienzo con la ayuda de un tórculo.

Proceso de volteado del lienzo con la ayuda de un tórculo.

Como habéis visto, un lienzo de semejante envergadura supone movilizar a los once miembros del taller para manipular la tela con seguridad. Además nos ayudamos de un tórculo cilíndrico para facilitar el volteo y evitar los posibles accidentes que se pudieran ocasionar en el movimiento de la tela.

Localización de las zonas de empapelado no adheridas.

Localización de las zonas de empapelado no adheridas.

Mientras le dábamos la vuelta, aprovechamos para localizar las zonas empapeladas que se encontraban desadheridas del soporte y asegurarlas mediante una segunda aplicación de adhesivo garantizando, de esta manera, su asentamiento antes de llevar a cabo el desempapelado.

Proceso de desempapelado y sentado de la policromía.

Proceso de desempapelado y sentado de la policromía.

Los tratamientos del reverso se iniciaron con una limpieza mecánica en seco empleando brochas y aspirando la suciedad removida para evitar que se posara en otras zonas. Proseguimos con una segunda limpieza basada en la aplicación de humedad con engrudo de almidón para reblandecer la suciedad y facilitar su eliminación. La metodología que seguimos para evitar el exceso de humedad y conseguir una humectación uniforme en la totalidad del tejido, fue aplicar el engrudo siguiendo un esquema cuadriculado, alternando así las zonas a limpiar.

Tras esta intervención volvimos a darle la vuelta, dejando la pintura hacia arriba para proceder al desempapelado y asentado de la policromía en zonas puntuales con la espátula caliente. Antes de comenzar, tuvimos que readaptar la plataforma deslizante para conseguir intervenir en todo el ancho del lienzo sin tener que estar en contacto directo con la superficie de la policromía, además de facilitarnos una mejor ergonomia ya que nos permitía acceder a la obra de forma más cómoda y eficaz. En nuestra profesión, esta claro que el “papel principal” lo tiene la obra y que es esta la que lleva “la voz cantante” a lo largo de todo el proceso de restauración. Aún así, en la medida de lo posible, intentamos encontrar la mejor ergonomia para asegurar la salud del trabajador.

Proceso de desempapelado y sentado de la policromía.

Proceso de desempapelado y sentado de la policromía.

 

Proceso de desempapelado y sentado de la policromía.

Proceso de desempapelado y sentado de la policromía.

Finalizado el desempapelado se volvió a insistir puntualmente en el sentado de la pintura en las zonas más críticas. Antes de empezar con la limpieza de la policromía, se realizó el primer protocolo de limpieza. El objetivo de esta prueba es adecuar las mezclas de disolventes y su metodología de forma que resulten mínimamente invasoras pero al mismo tiempo suficientemente eficaces. Siempre hay que tener presente la naturaleza de los materiales extemporáneos a retirar para intentar acercarse a la disolución más adecuada. Como ya os adelantamos en las anteriores entradas, cuando os hablábamos de los protocolos de limpieza realizados en el Retablo de la Virgen del Carmen I y II, el procedimiento en esta obra fue exactamente el mismo. Empezamos  con el test de disolventes orgánicos neutros o Protocolo 1. Aunque los resultados de estas pruebas fueron buenos en los colores rojizos, en las otras tonalidades no se apreciaba el mismo grado de limpieza (como se observa en las fotografías de resultados que aparecen más abajo). Al no adecuarse convenientemente a la capa pictórica, procedimos a realizar el test acuoso o Protocolo 2, vinculado al pH. Los resultados de este segundo protocolo fueron más satisfactorios.

Realización del test acuoso.

Realización del test acuoso.

Como seguramente habréis podido comprobar, en la zona inferior central del cuadro hay una abertura desproporcionada con el extremo superior en forma de arco semicircular. Esta coincide con el otro lienzo de menor tamaño que se encontró en el coro junto a la obra. Lo cual nos indica que éste lienzo, en el momento de mayor esplendor del cuadro, acometería la función de puerta.

Imagen general de la puerta.

Imagen general de la puerta.

 


Articulo original:
El “grandísimo” Ecce Homo de Bordalba
Escuela Taller de Restauración DPZ XIV.
Publicado el 26 de Noviembre de 2015
http://www.escuelatallerrestauraciondpz.es/el-grandisimo-ecce-homo-de-bordalba/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *